Por: Ricardo Enrique Bulla
Fotografías: Luisa Fernanda Montaño Londoño – Google imágenes
Todos los animales son seres vivientes, sensibles, merecedores de respeto y cariño. En consecuencia, el hombre puede y debe mitigar su sufrimiento, cuidarlos y protegerlos ya que generalmente la vida de las mascotas es más breve que la nuestra.
Las mascotas en cualquier momento pueden sentirse agresivas, celosas, tristes, inquietas, indiferentes, apáticas, independientes, posesivas, dominantes o amedrentadas, porque ellos poseen facultades emocionales igual que el ser humano manifestando amor, cólera, tristeza, miedos, etc.
Un tratamiento milenario, pero que se ha venido utilizando últimamente son las esencias florales. Al ser incorporadas dentro los tratamientos veterinarios, brinda sosiego al estado de desequilibrio emocional que enferma a la mascota. Hay que dejar en claro que las esencias florales no son adictivas, no son reemplazo del médico o del veterinario ni de otras terapias, ya que bien indicadas, son complemento de de estas mismas. En general, las esencias florales en los animales no representan riesgo; son compatibles con la medicación actual o futura y constituyen en un aliado del veterinario para la acción terapéutica previamente.
Particularmente, las mascotas responden a las esencias florales más rápidamente que los seres humanos. De manera que la dosificación varía de acuerdo a la patología a tratar, al terapeuta, así como al criterio del veterinario o profesional que las dosifique. Si hay varias mascotas en la casa, y todos llegaren a tomar del mismo recipiente donde se ha colocado las esencias florales (en el agua), no existe el menor problema ni el menor riesgo, en algunos casos incluso, es muy conveniente.
Algunas de las esencias más utilizadas son:
- Rescate: es un compuesto de 5 flores, que mezcladas actúan sobre el pánico, el terror, la impaciencia, y la falta de atención. Se utiliza cuando existen diferentes patologías y se desea armonizar y equilibrar a la mascota antes del tratamiento veterinario. Se recomienda que una vez pasados los 15 días de iniciar el tratamiento con el Rescate no se presenta mejoría, se debe detener su suministro e iniciar un nuevo tratamiento con la esencia floral específica para que brinde sosiego al estado de desequilibrio emocional del animal.
- Achicoria: ideal para mitigar los comportamiento posesivos.
- Aspen: ayuda a controlar el pánico cuando padecen de claustrofobia.
- Estrella de Belén: útil cuando sufren de traumatismos físicos.
- Olivo: para cuando los síntomas son de agotamiento físico y mental (reciben con dificultad las órdenes).
En conclusión, sin llegar a tener la necesidad de utilizar medicamentos, las esencias florales son ideales para tratar los diferentes comportamientos que presentan las mascotas sin efectos secundarios con contraindicaciones, convirtiéndose así en una herramienta ideal y segura para el veterinario, la mascota y su dueño.